miércoles, 25 de febrero de 2009

Los guionistas saben vivir bajo presión

Su trabajo se desarrolla en la trastienda. Ellos crean los diálogos ingeniosos, las entradillas de los presentadores y las tramas de los personajes de las series que nos enganchan semana tras semana.

Los guionistas de televisión, tanto de los programas de ficción como los de no ficción, viven en una profesión lastrada por los vaivenes de los gustos de los espectadores y la predisposición de las cadenas a apostar por la producción propia.


“Hacer guiones en tele está marcado por la audiencia y la actualidad, tiene más adrenalina que el cine y te permite aprender mucho”, resume Juan María Ruiz, coordinador de guiones de la serie Hospital Central (Videomedia). Ruiz, de 37 años y con 13 de experiencia, se refiere a una competencia en aumento y a la precariedad como los principales problemas de esta profesión.

A este cóctel en constante cambio hay que sumarle la “inestabilidad” por la rápida sucesión de programas, tal y como reconoce Laura Belloso, productora ejecutiva de El Internado (Globomedia). A sus 41 años y tras siete de experiencia en el mundo de la ficción, Belloso tiene claro que es la audiencia la que decide y el guionista quien debe “seducirla”.

Sin embargo, no interpreta la cuota de pantalla como un factor de presión sino como una “premisa con la que se trabaja”, en una televisión generalista donde los productos deben gustar tanto a los niños como a los abuelos para que se conviertan en un verdadero éxito.

“El reino de los guionistas”

Respecto a las diferencias entre el trabajo en cine y televisión, el coordinador de guiones de Hospital Central reivindica el trabajo en el medio televisivo tanto desde el punto de vista económico, porque es más “estable”, como del creativo: El cine es como el reino del director; el teatro, del actor, y la tele, el de los guionistas. Sea como sea, Ruiz reconoce que tienen menos visibilidad, y tiene muy clara su “venganza”: “La difusión de nuestra obra es mucho mayor que la de una película”.

Para Igor Zabala (35 años), jefe de I+D de la productora 3 Koma 93 y guionista de El coro de la cárcel, no sólo se hacen diferencias entre cine y tele, sino también dentro del propio trabajo televisivo: Los guionistas de series están menos valorados que los de cine, y los de no ficción ya son el último eslabón en la cadena, se queja.

La crisis actual afecta a todos los ámbitos y, a este respecto, la productora ejecutiva de El Internado cree que el medio está “en un momento difícil”, en el que las cadenas “no arriesgan y no tienen paciencia” con las series. Sin embargo, Belloso cree que en momentos como el actual hay que pensar en “series más baratas de producir”. Frente a esto, Amando Cabrero, coordinador de guiones de

Saturday Night Live, (46 años), cree que esta crisis viene del “aumento de los canales temáticos y la oferta” y que la coyuntura económica hace crecer el consumo televisivo. En este sentido, Belloso también se muestra optimista: “La tele está en un buen momento de producción de ficción y es en estas épocas en las que la gente quiere ver historias más alejadas de la realidad”.

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